Reciclar consiste en reutilizar elementos y materiales que, en vez de convertirse en basura, pueden retornar al ciclo productivo. Además, es la manera más directa y efectiva que tiene el ser humano de hacer algo por el medio ambiente. Hoy en día, estamos más concienciados sobre la importancia de cuidar nuestro medio ambiente y la mayoría intentamos reciclar para evitar su contaminación, pero a veces, el reciclaje resulta una tarea complicada, pues no sabemos con exactitud de qué están hechos los objetos que utilizamos a diario y por tanto no sabemos cómo desecharlos adecuadamente.
En Colombia, donde se consumen aproximadamente veinticuatro kilos de plástico por persona al año y se producen doce millones de toneladas de residuos sólidos al año, solo se recicla correctamente 17 %, todo esto se debe a que muchas personas creen que reciclar solo consiste en separar los desechos orgánicos del plástico, el vidrio y el papel. Y no, también hay que saber cuáles materiales se pueden reciclar y cuáles no, y por supuesto, cual es la forma correcta de hacerlo.
Estos son algunos de los errores más comunes a la hora de reciclar:
1. No aprovechar los residuos orgánicos: aunque los desechos de comida deben ir a la caneca verde, lo ideal sería depositar las frutas, las verduras y las cáscaras de huevos en un compost casero, ya que, con el tiempo, el compost servirá de alimento para las plantas y jardines.
2. Disponer el material reciclable lleno de comida: si un producto que sea reciclable está sucio o tiene desperdicios de comida, no podrá ser reciclado. Por eso siempre hay que lavar muy bien las latas, las botellas y los envases de plástico.
3. Creer que el papel aluminio no se puede reciclar: aunque muchos creen que el papel aluminio no puede reciclarse, están equivocados. Este material, al ser 100% aluminio, puede reciclarse todo lo que se quiera. Por lo que puede depositarse en la caneca gris.
4. Pensar que el icopor sí se recicla: el icopor es uno de los materiales más complejos, pues está en recipientes de comida, cajas de domicilio, tazas de café y en los rellenos aislantes de muchas construcciones. Además, su proceso de fabricación contamina el aire y crea grandes cantidades de desechos tóxicos que causan un gran daño al planeta. Al ser un derivado del plástico y del petróleo, no puede reciclarse, por lo que cualquier envase de este material debe ir a la caneca verde de desechos ordinarios.
5. Disponer vasos o copas rotas en la caneca equivocada: deben ir a la caneca verde, ya que los vasos y copas no son de vidrio sino de cristal, el cual contiene óxido de plomo, un compuesto químico que no les permite ser fundidos en los mismos hornos del vidrio. Tampoco pueden reciclarse espejos, vidrios de ventanas o de carros, bombillos o ampollas de medicinas.
6. No saber que las servilletas y toallitas húmedas contaminan el reciclaje: las servilletas, aunque son de papel, no pueden reciclarse si están usadas. Por su parte, las toallitas húmedas, si bien tienen celulosa de papel, también contienen exceso de fibras derivadas del petróleo y contaminan el reciclaje, por lo que ambas deben lanzarse a la caneca verde.
7. Disponer las pilas en cualquier caneca y no en los lugares específicos: las pilas no se pueden reciclar, tampoco pueden depositarse en la caneca verde de desechos orgánicos, ya que tienden a derramar todo tipo de sustancias químicas. Lo mejor es llevarlas a puntos de recolección en supermercados o centros comerciales. Otra opción, más amigable con el medio ambiente, es comenzar a utilizar pilas recargables.
Fuente: https://www.ecologiaverde.com/errores-mas-comunes-del-reciclaje-1505.html
